¿Quiénes son los millennials??

25.11.2021

Son los jóvenes nacidos a partir de los 80, una generación digital, hiperconectada y con altos valores sociales y éticos.

Las encuestas internacionales muestran que los millennials, cuya edad actualmente oscila entre los 26 y los 40, más o menos, tardan más, en promedio, en dejar la casa de sus padres o en alcanzar los hitos tradicionales de la vida adulta, como comprar una propiedad o un automóvil.

Los 'millennials' han hecho posible una realidad en la que atender a varios dispositivos a la vez es posible.

La mayoría de estos jóvenes consumen contenido en 'streaming' (cuándo, cómo y dónde se quiera ver), y el móvil, las redes sociales y el vídeo online como las claves del sector digitales.

La primera generación que vivió con ordenadores, teléfonos inteligentes, internet y el flujo global de información desde una edad temprana .... Sin embargo, esa facilidad para ponerse delante de las pantallas puede ser causa de que a los 'millennials' les cueste horrores establecer una comunicación directa con otras personas.

Este fenómeno, que recibe el nombre de teléfonofobia, se define esencialmente por una ansiedad mental de interactuar con otros por teléfono.

Los 'millennials' no llaman por teléfono, ¡la ciencia explica por qué!

Este miedo a hablar por teléfono y al menos uno de cuatro 'millennials' la padecen.

Una empresa de telecomunicaciones llamada BankMyCell se percató que los millennials no hacen llamadas telefónicas como usualmente lo hacían generaciones anteriores.

Por esa razón, se realizó una encuesta a 1,200 personas a quienes les hicieron algunas preguntas con respecto a lo que sienten al recibir o realizar llamadas y los resultados fueron sorprendentes.

La encuesta arrojó que la generación millennial se siente incómoda al realizar llamadas por diversas razones:

- 75% piensan que puede llevar mucho tiempo y prefieren comunicarse de manera rápida.
- 65% creen que quien hace una llamada es una persona que necesita algo.
- Al 55% no les gusta responder porque siempre están ocupados o en eventos.
- 49% creen que quien llama es alguien que quiere pedir un favor.
- 46% creen que podría darse una confrontación verbal si deciden contestar.
- 41% sienten que al hacer llamadas telefónicas las personas alrededor escucharán la conversación.
- 37% siempre reciben llamadas en horas de trabajo y prefieren no responder.

La "telenofobia" existe y muchos la padecen sin saberlo

Además, se comprobó que el fenómeno de no querer intercambiar una conversación a través de una llamada se le llama "telenofobia" y al menos una de cuatro personas de la generación la padecen.

No llames, manda un audio

Básicamente, la telenofobia es la necesidad de querer prepararte mentalmente antes de una llamada, sin importar de qué trate, y evitar asi sentirte vulnerable ante ella.

"La falta de seguridad en sus habilidades comunicativas ante la conversación presencial y simultanea hace que pongan en marcha mecanismos de defensa ; si no responden, no hay oportunidad de poner a prueba ese déficit de habilidades", explica el psicólogo.


"En una llamada no pueden borrar las palabras pronunciadas en vivo dentro de una conversación. Esto genera menos seguridad y confianza que, por ejemplo, emplear una nota de voz, formato que les permite repetir su alocución tantas veces como sea necesario antes de enviarla".

No es malo... solo hay que adaptarse

Yo, que no soy millennial y estoy muy lejos de serlo , en realidad, estoy de acuerdo en varios puntos:

  1. Un mensaje de texto lo puedes leer y contestar cuando te venga en gana, una llamada, sin embargo, requiere tu atención inmediata si quieres saber de qué trata el asunto por el que te reclaman.

  2. Porque a veces quitan demasiado tiempo
    Si alguien nos hace perder demasiado tiempo al teléfono, es más complicado cortarlo con cortesía.

    Además, si de verdad tienen que hablar largo y tendido, ¿por qué no citarse en persona?

  3. Las llamadas se unen a conversaciones con temas de mayor importancia y cuando alguien se molesta en gastar tiempo en llamar es porque es algo urgente.

    Por tanto, si interrumpen mis tareas para coger el teléfono y luego no es importante, me molesta.

  4. Porque las palabras se las lleva el viento
    Tener las cosas por escrito nunca está de más, así nada se puede escapar y es más sencillo recordarlo.

  5. Porque puedo contestar algo de lo que arrepentirme
    Contestar el teléfono con desgana puede desembocar en una situación incómoda. Una llamada de teléfono requiere cierta atención para responder correcta e inmediatamente.

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